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Un Perro Desentierra a un
Gato Amigo Suyo porque No Aceptaba Su Muerte
Amores perros
Marcelo Justo
BBC Mundo
La familia de Oscar tendrá que reconfortar a su mascota por la
pérdida de su amiguito, Arthur.
La vida sentimental es impredecible. Y no me estoy refiriendo a los humanos.
Fíjense lo que pasó acá en Inglaterra, Manchester, con Óscar, un perro, que
extrañaba tanto a su gato compañero de juegos recientemente fallecido que lo
desenterró y lo llevó de nuevo a la casa de familia.
Según los dueños los dos animales eran inseparables.
El gato, que era más grande que el cachorro, solia ayudarlo a subirse al sofa,
donde los dos disfrutaban, uno pegado al otro, del calor de la casa en el duro
invierno inglés.
Es de imaginar la sorpresa de Óscar cuando vieron que los dueños se llevaban al
jardín a un Arthur inerte, cavaban un hoyo, depositaban al gato allí y lo
volvían a cubrir de tierra hasta hacerlo desaparecer de la vista.
El entierro
No acostumbrado a esta ancestral ceremonia humana del entierro, sin poder
resignarse a la ausencia de Arthur, desconcertado incluso por el papel de los
dueños de casa en el drama, Óscar esperó todo ese día hasta la noche para
rescatar a su amigo.
No acostumbrado a esta ancestral ceremonia humana del entierro, sin poder
resignarse a la ausencia de Artur, Oscar esperó todo ese día hasta la noche para
rescatar a su amigo.
Debió costarle mucho porque, como decía antes, Arthur era más grande que él,
pero así y todo, lo desenterró, cruzó con él el jardín, atravesó ese otro
escollo insufrible, la puerta para el gato que tienen muchas casas inglesas, lo
que debe haberle costado muchísimo, alzarlo y hacerle atravesar ese pequeño
cuadrado incrustado en la otra puerta, la que usan los gigantes humanos, y se lo
llevó a dormir a su cesta.
Eso sí, antes de conciliar el sueño, lo lamió para limpiarle toda esa horrible
tierra que se le había pegado al cuerpo.
Los dueños de Óscar tuvieron que enterrar nuevamente a Arthur, pero tomaron esta
vez dos precauciones. No dejaron que el perro presenciara la ceremonia de
entierro y le compraron un nuevo gato para que no eche tanto de menos a su
amigo.